Soy Verónica Garne y, aunque mi trayectoria laboral me llevó en mis inicios por otros caminos, desde niña he soñado con dedicarme al estilismo y el maquillaje profesional.
Utilizar los productos, las técnicas y los colores para resaltar las distintas facciones de la cara, transformar una mirada o una sonrisa con la ayuda de trucos de maquillaje, y, sobre todo, proporcionar la satisfacción a la persona de verse más guapa y ver cómo se le ilumina el rostro al descubrirse tras un maquillaje profesional es algo, para mí, fascinante.
Hace 6 años decidí emprender esta aventura y tratar de cumplir mi sueño: crear mi propio estudio de maquillaje profesional y proporcionar a mis clientes lo que siempre quise transmitir: “la belleza está ahí, a pesar de los rasgos faciales que tengamos, y un buen maquillaje puede hacerla resaltar”.
Todos y todas debemos tener la oportunidad de vernos guapos/as, de sentirnos a gusto, de disfrutar de un rato propio y de aprender pequeños trucos que nos ayuden a vernos mejor día a día.
“El maquillaje es mi gran pasión, y así trato de transmitirla a mis clientes”
La belleza y el bienestar son para mí dos de las cosas más importantes. La belleza de la persona en todas sus facetas se refleja y se refuerza, al mismo tiempo, en la imagen, y el bienestar contribuye directamente a la satisfacción personal. En la actualidad, el rápido ritmo de vida nos lleva corriendo de una actividad a otra (trabajo, estudios, familia, casa, actividades extraescolares,…) descuidando nuestro propio bienestar.
En el estudio de Verónica Garne tratamos de crear un ambiente acogedor, tranquilo y agradable, en el que las prisas y las actividades diarias no tienen cabida. En cada sesión el tiempo se detiene, lo importante eres tú: tu bienestar y tu satisfacción.
Tómate un rato para ti: un café, una música agradable, un momento de relax y prepárate para sacar el mayor provecho de tu belleza.
“Deslúmbrate y deslumbra a los demás con el mejor maquillaje profesional en el mejor ambiente para conseguirlo”